divendres, 24 de juliol del 2009

Viernes por la tarde en Rangún

"Es fin de semana y se nota. Con eso quiero decir que la vajilla se acumula desde hace dos días y, con el calor reinante, hay como un olor que se difunde lenta pero inequivocamente hasta el salón.
Me acuerdo de que al principio jugaba a ser generoso y limpiaba la cocina el domingo por la tarde para que la niñera no tuviera que hacerlo el lunes por la mañana. Todo eso, para no tener mala conciencia, evidentemente.

Después empecé a relativizar. ¿Cuántas veces he visto a expatriados a los que una criada les preparaba el almuerzo el domingo mientras que otra se ocupaba del crío?

-¡Ah, sí! Pero se les paga un extra por venir el domingo.

-¡Pff!

A ver, como si estuvieran en situación de rechazar algo...

-Del tipo "no, gracias, pero mi convenio colectivo me permite al menos un día de descanso a la semana para que yo también pueda ver a mis hijos."